Hoy volví a tropezar con la misma piedra, con la misma que tropecé varias veces este año, una caída en la facultad, es que cada vez se hace todo más difícil, y aunque yo siempre este con la mente en el positivismo diciendo que es fácil no lo es, es en ese momento que la vida por así decirlo me da un golpe... Mi sostén no esta en mi casa, si no que encuentro decaídas ahí, mi sostén esta en ellas y en el, mis amigas, mi novio, que SIEMPRE están, ellos que me impulsan a seguir, a continuar remando, las que valoran mi esfuerzo y nunca me dicen 'no podés' todo lo contrario.

Sin dudas, son regalos de la vida. Algo que muy pocas personas tienen, y yo encontré.